Una nuevo capa de cebolla que quitamos, hemos tirado la capa del 2007 para ver florecer la del 2008. Y es que ya hemos empezado el año 2008. La verdad, como siempre no notas ningún cambio, todo sigue igual y además parece que incluso tienes menos ganas de trabajar. Los madrugones se acumulan y el trabajo escasea en el hotel, en fin, ley de vida en temporada baja.Y como siempre yo no he hecho ningún nuevo propósito para el nuevo año. Deseos muchos, pero no me marco ninguna meta. Sé que estoy bien y por lo menos espero seguir así. Mi vida personal es buena, dispongo de buena salud y a priori no tengo quejas mayúsculas, aunque uno de mis defectos sea el quejarme en exceso. Y así empezamos el 2008, año de acontecimientos deportivos y año nuevo que intentaremos disfrutarlo y vivirlo lo más felices que podamos. Que a todos nos marche bien, hasta pronto.
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