No, ciertamente no es Usain Bolt, aunque en esta ocasión me podía haber ahorrado la comparación ya que el señor Bolt quedó eliminado en la final sorprendentemente, pero también hay que atribuirle cierto mérito a este "velocista" samoano. El mérito de salir a la pista a competir y dejarse la piel, puesto que la marca dista mucho de ser meritoria, 15,66 segundos. Soy de los que piensan que para que no pasen estas cosas se deben poner límites en cuanto a un mínimo para presentarse a lo que son todo unos Mundiales de Atletismo. En fin, que el samoano dió todo lo que tenía dentro y gracias a ello, como Moussambani en su momento en natación, se ha convertido en todo un icono. Aquí os dejo su carrera...
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