Lo cierto es que trabajar en un sitio donde el ambiente es bueno ayuda. Siempre he dicho que quizás me he acomodado en demasía en el hotel, llevo 6 años y la verdad es que me siento a gusto, estoy bien, sin problemas y viviendo una época tranquila, que no es poco.Aunque es cierto que si hay algo bueno en este trabajo es el grupo de gente que convivimos día a día. Nadie se libra de tener algún mal rollo, es inevitable, pero a modo general es encomiable ver el compañerismo y buen rollo que existe entre la mayoría de la gente. Da igual tener turno con Rubén, que con Amaia, Ales, Igor... que tener en el bar a Tati, Mireya o charlar con Rami o Manu. En fin, que como bien demuestra la foto de la fiesta que nos corrimos la semana pasada, se nota el buen humor y compañerismo existente entre nosotros. Da gusto poder salir de fiesta con gente del trabajo y disfrutar en un ambiente distinto al natural, sin hablar del curro y disfrutando con la gente que convives habitualmente, pero en modo informal. Da gusto tener compañer@s así, y que siga... hasta pronto.
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