El MVP que se avecina...

Acabó el Mundial de basket de Turquía en septiembre y me quedé con un regusto amargo. Había seguido a la selección de USA casi todos los partidos y D-Rose no me había encandilado nada. Jugando poco, tirando poco, encestando poco y todo con bastante mala impresión.

Siempre he sido de los Bulls y la verdad es que a este tío le había visto hacer cosas buenas en la NBA, pero en el Mundial me dejó con la incógnita de lo que verdaderamente era como jugador. Es cierto que al lado tenía jugadores, estrellas NBA, que chupaban muchos más tiros y que estaban más finos que él, pero sinceramente esperaba más del jugador franquicia de Chicago.

Empezó la temporada 2010-2011 con el equipo reforzado y buscando sus límites. Un coach nuevo y con la intención de acoplar las piezas lo antes posible. Se habían escapado de Chicago jugadores apetecibles como Stoudamire, Bosh o James y el refuerzo estrella había sido Boozer. Después de un inicio titubeante las piezas empezaron a encajar, la defensa se endureció y las victorias empezaron a llegar cuando el entrenador consiguió encontrar una rotación adecuada. Y todo eso a pesar de las numerosas bajas en el juego interior, primero Boozer, luego Noah y así hemos tenido que ir remando con el abuelo K. Thomas y con el novato turco Asik.

Pero por encima de todas y haciendo una temporada colosal está D-Rose. ¡ Vaya megacrack! vaya temporadón que se está marcando, a un partido están los Bulls de ser la mejor franquicia de la NBA. Un gustazo después de una travesía por el desierto que ha durado desde la marcha del mejor jugador del mundo, obvio decir quién, total: 12 temporadas vacías. D-Rose ha conseguido lo que Jordan consiguió en su momento, edificar un equipo a su alrededor y ser una estrella ilusionando de nuevo a la parroquia de Chicago.

Con una temporada que se resume en 25 puntos, 8 asistencias y 4 rebotes de media y con una marca de 56-20 a falta de 6 partidos, los Bulls de Rose se han ganado el derecho a soñar, el derecho a pensar que son una alternativa en una duro y complicada conferencia Este. Ahora queda subir un peldaño más, dar el callo en los play-offs, donde se cuece de verdad la temporada y donde los equipos sacan lo mejor de sí mismos, ese es el siguiente reto de Rose, dar el salto definitivo en los play-offs y llevar al equipo a la final... ¿ estará preparado? lo veremos en las próximas semanas, de momento señores y señoras, tenemos un nuevo MVP en la ciudad: el número 1de los Bulls Derrick Rose.