Sí, ya sé que he vuelto hace casi tres semanas, pero he necesitado todo este tiempo para digerir que las vacaciones se habían acabado, antes de poder ponerme a escribir sobre ellos. Ha sido duro volver, sin duda, pero el cuerpo y la mente se acostumbran rápido y lo mejor es pensar cúando volveremos a tener las ansiadas vacaciones y pensar que no están tan lejos como creemos.Atras han quedado los dolores de espalda, creo, he dejado también de lado el dolor de muelas después de intensas sesiones con el dentista y ahora estoy centrado de pleno en aprovechar y disfrutar los días, los fines de semana, de mi nueva casa, de convivir por fin con Eki y de tener un buen ambiente en el trabajo. ¡Ah! y a poder ser que mi Athletic no nos lo haga pasar mal esta temporada y podamos disfrutar del equipo un poco. Así que mejor tener la mente despejada y relajada, que las pilas se mantengan recargadas durante tiempo y que esta vuelta a la rutina sea lo más llevadera posible.
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